Entre diciembre de 1942 y 1944, el submarino Casabianca desembarcó elementos de inteligencia, radios, municiones y armas en Córcega y Provenza para los Maquis. Su carácter esquivo le valió el apodo del “Submarino Fantasma” por parte de las tropas alemanas.
El submarino francés Casabianca había hecho una dramática huida de Toulon, cuando la flota francesa se vio amenazada por los alemanes. Ahora estaba jugando un papel activo en la guerra, trabajando a las órdenes de la Armada Real, pero participando en actividades para apoyar a la Resistencia francesa.
La resistencia en la isla francesa de Córcega, ahora ocupada por los alemanes, tenía un papel importante dentro de la estrategia de los Aliados. Se esperaba que mantuviera la amenaza de una verdadera invasión de la isla, en lugar de la propia Italia, por el mayor tiempo posible -por lo tanto ocupando más fuerzas alemanas-.
La resistencia francesa en la isla necesitaba un apoyo sustancial para ser una amenaza real para los alemanes. El Capitaine de Frégate L'Hermimier, comandando el Casabianca, describe cómo se logró, aunque no siempre fue sin problemas:
En camino al punto de desembarque. El Casabianca habiendo navegado desde Argel a las 1900, el 27 de julio de 1943, después de un trayecto normal, llegó a la posición, se sumergió, a las 0430 el 30 de julio, a 10 millas del Cabo Rosso y la Isla de Gargalo.
Después de hacer una revisión, dirigió el rumbo hacia el punto “A” en Playa Gradelle. A las 1452 en un fondo de 31 metros, a unos 500 metros de la playa, la cabeza de la nave hacia el Norte.
Hice mi último reconocimiento de periscopio 1½ horas antes de descansarla en el fondo, y continué por estimación y utilizando sonar, con el fin de evitar el riesgo de ser avistado desde la costa.
PUESTO A PRUEBA DE UN ATAQUE REAL DEL ENEMIGO
Bajamos: -dos “dories” para un reconocimiento preliminar de la playa y para remolcar los botes de goma. 14 botes de goma para transportar el material.
A las 2250, salí a la superficie. La vista es alucinante. La costa se cierne ante nosotros a una distancia de 500 yardas. El Golfo de Porto se extiende a estribor y la orilla sur se acerca a popa. Las playas A y B se destacan blancas. Nos abrimos paso a velocidad muy lenta, navegando entre las rocas que se extienden a babor y estribor. En silencio absoluto, el Comando baja los dos dories y empieza a inflar el primero de los botes de goma.
A las 2300, el enemigo abre fuego contra nosotros. Los disparos parecen venir de todas partes. Armas automáticas abren fuego. Rondas silban por encima, otros impactando al alcance de la mano. Todo el mundo se fue abajo con la mayor calma. Mientras tanto, puse los dos motores rápidos hacia popa. De milagro nadie es herido. Pero los dos dories se arrastraron en sus pescantes, que no fueron enviados. Los botes de goma están todavía en la caja, así que esperamos hasta que saliéramos de la bahía antes de asegurarlos.
PASAJE DEL GOLFO DE PORTO
Mientras estábamos abriendo el rango de la costa, el enemigo continuó disparando. Todos los emplazamientos en el distrito son sin duda la causa de alerta para todo el ruido. Decidí dejar esa zona y probar suerte de nuevo en el Punto Curza la noche siguiente. Tengo la intención de utilizar los mismos escondites que la vez anterior, puesto que ya son conocidos por los patriotas y el reconocimiento dirá si habían sido descubiertos por el enemigo.
En la medianoche del día 30, estamos tomando rumbo hacia la Bahía de Curza a 16 nudos.
DESEMBARCO EN LA BAHÍA O CURZA
Después de nuestro enfoque habitual, estábamos tumbados en la parte inferior a una milla del punto de desembarque a las 1522 el 31 de julio.
Superficie en 2255/31 de julio. El Comando prepara su equipo de desembarco mientras tomo rumbo hacia el extremo occidental de la playa Saleccia con el fin de que llegar lo más cerca de la costa como sea posible. La experiencia de la noche anterior nos ha hecho muy cautelosos. El primer teniente pidió mi permiso para toman el mando del Comando. Consiento voluntariamente.
Hemos fondeado a unos 400 metros desde el extremo oeste rocoso de la playa, en la que esperamos ocultar algo del material en el mismo lugar que a principios de julio.
El Comando zarpa bajo el mando del teniente primero. Se compone de dos trenes, aquel del primer teniente y el de los ingleses que fueron enviados para ver el desembarco por su propia organización en Argel. El primer teniente está equipado con un aparato R/T de corto alcance y, después de un breve reconocimiento, nos informó que todo está claro. Así que empezamos a desembarcar los botes de goma.
Si deseas saber más, busca el Reporte de Patrullaje original en los Archivos Nacionales británicos.
Para más información sobre el submarino Casiabianca, visita Lean Submariner.
El submarino francés Casabianca fue uno de los pocos navíos que habían escapado con éxito en Toulon y ahora estaba trabajando para suministrar a la resistencia francesa en Córcega.
Procedente de una familia de marinos, Jean l'Herminier, ingresó en la Academia Naval en 1921 y se convirtió en un submarinista especialista: Su energía y valor le permitieron recibir el mando del submarino Casabianca en abril de 1942. El salvó al submarino del hundimiento de la flota francesa en Toulon, en noviembre de 1942.
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