Calles desiertas en Polonia
Tropas del ejército polaco conducen sus caballos a través del puente sobre el Río Weichsel.
Para el 5 de septiembre de 1939, el Ejército Modlin había sido empujado hasta la misma Modlin y cuando la División Kempf alemana derrotó a la 41ª División (Reserva) de Infantería polaca en Różan y logró cruzar el Río Narew, Varsovia quedó cada vez más expuesta a la amenaza de un ataque desde el norte.
Al sur, a lo largo de la saliente controlada por el Ejército Poznań, no había combate de gran escala, pero si encuentros de menor tamaño a lo largo de la frontera y las formaciones de la Guardia de Casa, así como los intentos de los alemanes de la localidad organizando algunos ataques y tácticas de distracción tal y como lo hicieron en Bydgoszcz.
Klemens Rudnicki, del 9º Regimiento Ulan (Lanceros), quien después comandaría la 1ª División Blindada polaca en 1945, a diferencia de sus compañeros en el resto del país, vio poco combate durante los primeros tres días de la guerra. Su primera tarea fue relevar un batallón de la Fuerza Nacional de Defensa a unos 15 kilómetros al noroeste de Poznań. La ciudad misma estaba llena de aprensión por lo que estaba por venir. Más tarde, describe el estado de ánimo:
Pasamos por Poznań antes del amanecer. Las calles estaban desiertas, aunque nadie estaba dormido. Mucha gente abrió sus puertas y ventanas, atraídos por el estrépito de los cascos en el pavimento. No se veían luces por ninguna parte. Si alguien hacía una pregunta lo hacía susurrando -¡probablemente para no atraer la Fuerza Aérea enemiga!- Obviamente la ciudad estaba aterrorizada por el ataque aéreo de ayer y evidentemente la gente estaba ansiosa por conocer en qué dirección se estaban movilizando las tropas –hacia el oeste o hacia el este-. Todo dependía de esto y la ciudad se esforzaba en creer que no sería entregada. Por tanto, el regimiento, fue recibido con un suave aplauso: ¡estábamos cabalgando hacia el oeste!
Si deseas saber más, lee “The Last of the War Horses” [El último de los caballos de guerra], del general Klemens Rudnicki.
Un vuelo de tres bombarderos alemanes Ju 87 Stuka dirigiéndose hacia Polonia, a principios de septiembre de 1939.